Cuando pensamos en Spaguetti a la Bolognesa pensamos en Italia, más específico en Bolonia; pero, la salsa original no se creó en Italia, sino en Francia.
Para irnos un poco a la historia del Spaguetti a la Bolognesa hay que irnos a muchos años antes de Cristo para conocer un poco de la delicia que muy pocas, o quizá ninguna persona en el mundo, digan que no han probado.
Y es que, pese a que hay mucha historia sobre este platillo italiano, se habla poco de la creación de la Salsa Bolognesa.
La Salsa Bolognesa se servía como segundo plato en Galia en el siglo I A.C., es decir en la Francia actual. Y no se le conocía como Salsa Bolognesa sino como Ragú, término con origen etimológico en el verbo francés “ragoûter”, traducido como “abrir el apetito”.
Y no era precisamente roja, ya que se hacía de carne de ganado bovino, leche y vino blanco, fritos en trozos de grasa de carne de cerdo.
Fue en el siglo XVI, con la introducción del jitomate en la cocina italiana y europea, que la receta fue cambiando hasta llegar a la versión oficial y como la conocemos de finales del siglo XX.
Y quienes ayudaron a llevarla a Bolonia fueron los intercambios de estudiantes y maestros universitarios franceses.
Incluso fue en 1982 que la receta original en la Cámara de Comercio de Bolonia se incorpora por parte de la Academia italiana de la Cocina con el objetivo de preservar su origen para siempre.
Ahora es muy común, incluir esta salsa en todo tipo de pastas cortas, largas o rellenas, integrales o blancas y más comúnmente en el spaguetti, nuestra receta de hoy.
Hacerla es muy sencillo y te digo el cómo y qué necesitas.
Ingredientes:
- Carne de Res, ternera o cerdo (Incluso de pollo)
- Pasta larga como Spaguetti, Tallarines, Fettuccine, o Capelli D´Angelo.
- Zanahorias
- Jitomates
- Cebollas
- Apio
- Morrón Rojo
- Sal La Fina
- Pimienta
- Orégano
- Ajo en polvo o triturado (opcional)
- Aceite de Oliva
- Queso parmesano en rodajas delgadas o rayado
Preparación
En una olla agrega un chorrito de aceite de Oliva y cuando esté caliente agrega la carne molida
Sazona con Sal La Fina y pimienta.
Permite que la carne se fría y ve separándola con una espátula para que quede en pequeños trozos de carne frita.
Agrega la cebolla y fríe ambos
Cuando tu carne ya está frita retírala y agrega en la misma olla, la zanahoria picada en pequeños trozos, del mismo modo el chile morrón, cebolla y apio. Deja freír un poco y si es necesario agrega un chorrito de aceite de oliva.
Cuando estén un poco fritos agrega los jitomates triturados (puedes hacerlo, pasándolos por un procesador de alimentos).
Sazona con Sal La Fina, Pimienta y orégano (Puedes agregar ajo molido o seco)
Fríe unos 8 minutos y cuando veas que empieza a secarse el caldo agrega una taza, deja cocer. Cuando tu salsa comience a secarse nuevamente, agrega agua y no permitas que se vuelva a reducir. No dejes que seque, agrega agua cada vez que lo necesite y no dejes de batir para evitar que se pegue al fondo de la olla. Esto aproximadamente durante 30 mns. Verifica el sabor.
Cuando la salsa está bien cocida y todos los ingredientes muy suaves e integrados agrega la carne por media hora más. Vuelve a verificar el sabor y la cantidad de líquido, de ser necesario agrega más sazón con Sal La Fina y más agua. Sigue batiendo.
En otra olla con mucha agua hirviendo agrega Sal La Fina y Luego el spaguetti, deja que vaya cayendo al agua caliente y agita de vez en cuando para evitar que la pasta se pegue (puedes agregar un chorrito de aceite de oliva al agua caliente antes de agregar el spaguetti).
La pasta estará lista en un aproximado de 8 a 15 minutos, verifica que esté “Al Dente”. Esto quiere decir que no debe de estar muy suave, ligeramente firme pero cocida.
Conoce cómo es hacer una Pasta Al Dente dando click aquí.
Cuando tu pasta esté Al Dente, retírala del fuego, escurre el agua caliente. Echa suficiente agua fría hasta que la pasta cambie su temperatura a fría. Con esto evitas que se siga cociendo. Elimina toda el agua y regrésala a la olla donde la cociste, sin agua y tapada para evitar que se seque
Servir
En un tazón o en un plato grande sirve una cantidad generosa de pasta (trata de que se vea enrollada, luce muy bien) Y agrega encima una muy buena cantidad de Salsa Bolognesa bien caliente.
Agrega queso parmesano al gusto y acompaña en un plato por separado, una ensalada de tu elección. Disfruta con quien más quieras.
Receta e imágenes hechas por Martha Aline De la Fuente
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