El ahogamiento es una de las principales causa de muerte y daño cerebral en niños.
Coloca barandales alrededor de la alberca, mínimo de 1metro de altura.
Nunca dejes a un niño sólo en la alberca y nunca lo pierdas de vista.
Si un niño se pierde, primero revisa la alberca o las tinas. Recuerda, cada segundo cuenta.
Se recomienda iniciar con clases de natación lo antes posible. Hay técnicas actuales que sólo le enseñas a los niños pequeños a mantenerse a flote hasta ser rescatados o alcanzar una orilla.
Se recomienda un sistema de circuito cerrado para vigilar la alberca continuamente, así como sensores de movimiento.
Dr. Carlos Armenta
Pediatra – Neonatólogo – Mtro. Administración y Servicios de Salud