De seguro sabes que en maquillaje existen los llamados “correctores”. Estos correctores puedes encontrarlos según tu tipo de piel y lo recomendable es que, no solo los uses según tu piel sino la necesidad de corrección que necesitas. Para ello encontraras en la mayoría de las marcas una amplia gama de colores, desde el blanco hasta un camello y desde un chocolate hasta un crema.
Los correctores oscuros sirven, básicamente para crear efectos de sombra, es decir para hundir, alejar, achicar… por ejemplo, hundir mejillas, afilar la nariz o el mentón, alejar las sienes. Todo depende de tu forma de rostro y el efecto visual que quieras dar. También son muy socorridos para efectos dramáticos como cuando haces una caracterización de zombi, por dar un ejemplo de miles. Si aplicas un color oscuro sobre el hundimiento de las mejillas, en el área de las ojeras y afilas la mandíbula seguro consigues la mayor parte del maquillaje de zombi.
Los correctores claros, a diferencia de los oscuros pueden ayudarte a agrandar, rellenar, atraer … las partes más comunes en donde se aplica el corrector claro es en las ojeras, no tanto por que las aclare o disimule sino por que evita que se vean hundidas. También en comisura de boca y líneas de expresión por debajo de la nariz y a los lados de la boca. Rellena estos espacios disimulando esas líneas. En caracterización puede ayudarte a que las cicatrices se vean hinchadas; aplicas un poco de corrector claro, lo difuminas en la misma zona y encima coloreas una cicatriz o colocas un postizo, veras como se ve hinchado.
El corrector claro jamás deberás de usarlo para disimular un granito ya que si crea el efecto de agrandar y acercar, imagínate como se verá tu granito.
Para disimular granitos existen otros trucos, por ejemplo si el granito es rojo o rosado lo puedes disimular aplicando un punto de color verde y difuminar encima de él. También con este color puedes disimular venitas rojas o cicatrices.
Para los moretones y ojeras muy violáceas, se neutralizan utilizando el corrector amarillo.
Los granitos cafés, manchas de color marrón y algunas marcas de color naranja, son disimuladas cuando aplicas el corrector lila.
Con el corrector rojo puedes disimular algunas venitas verdes que se notan en pieles muy claras.
Si tienes vitíligo y eres de piel muy clara, el corrector en color coral puede ayudar un poco.
Los correctores de colores pueden encontrarlos en paletas con varios colores o en tonos individuales. Los correctores claros y oscuros los puedes adquirir por separado y en el caso de los claro deberán de ser máximo 2 tonos debajo de tu piel y los oscuros no pasar más de dos tonos más oscuros de tu piel.
El siguiente paso una vez que ya disimulaste esas imperfecciones es aplicar el corrector clásico por encima y después tu base de maquillaje. Verás que tu maquillaje queda como el de un profesional.
Artículo escrito por: Martha Aline De la Fuente
Mtra. Consultora en Imagen Pública.